Macroeconomía: ¿ciencia o religión?

De nuevo voy a volver a traducir un artículo que encontré en inglés. En esta ocasión, se trata del blog de Roger Farmer y me ha parecido muy interesante tanto en el contenido, por su visión crítica de la macroeconomía, como en la forma, por la simpática analogía que hace entre ciencia y la religión. Espero que lo encontréis útil también vosotros:



"En 1999, en un artículo ampliamente citado, "La ciencia de la política monetaria", tres importantes economistas, Richard Clarida, Jordi Galó y Mark Gertler, argumentaron que la política monetaria es una ciencia. Aunque hay algo de verdad en ello, también podrían haber titulado su trabajo como "Macroeconomía: ¿religión o ciencia?

La ciencia y la religión son compañeros raros. La ciencia data de la Ilustración. La religión, desde los principios de nuestra historia. La ciencia se sostiene por el racionalismo. La religión, por el dogma. La ciencia es contrastada por los experimentos. La religión es codificada por sabios y protegida por el sacerdocio. La macroeconomía tiene aspectos de ambas.

Los macroeconomistas construímos teorías con sistemas de ecuaciones. Usamos esas ecuaciones para explicar patrones en los datos económicos. A diferencia de las ciencias experimentales, como la química y la física por ejemplo, los macroeconomistas difícilmente podemos experiementar. Eso no significa que no podamos contrastar las teorías existentes, sino que es mucho más difícil. Al igual que los astrónomos esperan a la siguiente supernova, los macroeconomistas tienen que esperar a las grandes recesiones o a los grandes episodios de estanflación para estudiar las distintas teorías.
La imposibilidad de experimentar es más problemática de lo que los macroeconomistas pensamos. [...]*

Los macroeconomistas podemos explicar laos datos pasados relativamente bien, pero no son muy buenos explicando nuevos acontecimientos. Nuestras teorías están siempre evolucionando; en este sentido, la economía es una ciencia. El modo en el que se deja que nuestros modelos evolucionen está controlado por un grupo de "altos sacerdotes" que mantienen la puridad doctrinal. En ese sentido, la economía es una religión. El aspecto religioso es importante en los tiempos corrientes, cuando no ha ocurrido nada extraordinario. En otros momentos, después de observar una supernova económica, el control de esos "altos sacerdotes" es contraproducente y es un momento fértil para explorar las ideas que esos consideran heréticas. Ahora es uno de esos momentos."

Podéis leer el original en el blog del autor, al cual le agradezco su autorización para traducirlo.


ROGER FARMER
El autor, Roger Farmer.



* He omitido una parte un poco más técnica porque considero que el mensaje del autor ya está suficientemente recogido.

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